jueves, 28 de febrero de 2013

RESEÑAS I - POETAS ANDALUCES. Jesús cárdenas, "La luz entre los cipreses"



RESEÑAS DE OBRAS DE POETAS ANDALUCES

LA LUZ DE ENTRE LOS CIPRESES de JESÚS CÁRDENAS













ACERCA DE "LA LUZ DE ENTRE LOS CIPRESES", DE JESÚS CÁRDENAS.
Ediciones: En Huida

JESÚS CÁRDENAS SÁNCHEZ (Alcalá de Guadaíra, 1973), Es profesor de Lengua castellana y Literatura . Ha colaborado en distintas publicaciones y revistas literarias de reducida distribución y obtenido algunos premios de poesía. Fruto de sus trabajos de investigación ha  publicado varios libros en soporte electrónico: Espacios urbanos americanos en el “Diario de un poeta recién casado”, de Juan Ramón Jiménez, y “.El concepto de lo popular en Juan Ramón Jiménez. Orígenes de la poesía neopopularista”


Tras una  experiencia en diversas publicaciones  y  una madurez  poética contrastada nos ofrece su opera prima: La luz de entre los cipreses, que recibimos con el calor y ánimo que requiere una aventura como la de atravesar esa puerta tan cargada de misterio para todo poeta novel como es la publicación.


En La luz de entre los cipreses  nos manifiesta su versión del mundo con una voz intimista y personal, cargada de ecos de la poesía de siempre: amor, desamor, memoria, tiempo, cotidianidad, incertidumbre… Divide el libro en tres partes: Puntos de fuga, La misma soledad y Un abrazo a tiempo  , que conforman como tres niveles existenciales de una misma experiencia vital: La consciencia de lo inmediato y de la sutilidad de la pérdida, la ausencia y las máscaras de la soledad, y el encuentro o reencuentro del amor, estratos transversalmente hendidos de una poética profunda en la que perviven las constantes de la poesía, dentro de una urdimbre tejida por lo que define Enrique Baltanás en el prólogo de la obra: “ preocupación metafísica  por el sentido de la vida, por la verdad  o la mentira de la misma…”.., que se manifiesta  en la aceptación de la propia contradicción: “Soy el hielo y la sal juntos./ el permanente blanco de lo que ansío/ y el negro que deviene/…” y por una cierta sumisión a los designios del destino, a quien se entrega: “…Abrigados siempre/ por el destino y por sus imposibles/ esperan los deseos/ un cobijo/….”

 En este discurrir de la cotidianidad se hace patente la tristeza : “Qué vida en la tristeza. Suena adversa/ la tarde en los cristales. Estas nubes/ descienden, lluvia intensa y fuerte viento/…”, tristeza  que se hace soledad : “ Mientras, espero a solas un tren, busco/ en tu cuerpo que es el cuerpo que pienso,/ y no sé ya de mi…”,    y soledad que se hace fuerte en sus designios: “Ya no mires atrás, corazón”   pero que no puede evitar volverse nostalgia:  “…Mientras contemplo los atardeceres/ repaso –privado casi del juicio-, / el instante en que íbamos sentados/ en el mismo vagón/…”  , aunque las heridas abiertas duelan  en la soledad : “…Prefiero ahora envolverme/ en las sábanas de la soledad,/ en la desesperanza y sus disfraces….”y la memoria se encarga de avivar sus huellas:  “El tiempo parece un río de imágenes/ con el dique reseco del silencio…”. Sin embargo, el mismo tiempo se encarga de resolver


© F.Basallote
Publicado en Papel Literario , 25/10/2012

miércoles, 27 de febrero de 2013

RESEÑAS I - POETAS ANDALUCES. Joaquín Pérez Azaústre, "Las Ollerías".



RESEÑAS DE OBRAS DE POETAS ANDALUCES
LAS OLLERÍAS DE JOAQUÍN PÉREZ AZAÚSTRE








ABSOLUTA MEMORIA ,
sobre LAS OLLERÍAS DE JOAQUÍN PÉREZ AZAÚSTRE.
XXIII Premio Fundación Loewe
VISOR. MADRID. 2011

Joaquín Pérez Azaústre, (Córdoba, 1976). Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, es autor de los libros de poemas Una interpretación, Delta, El jersey rojo y El precio de una cena en Chez Mourice, y de novelas como América, El gran Felton y La suite de Manolete. Es colaborador de varias revistas literarias. Ha sido galardonado con el Premio Adonais de poesía, el Premio Loewe y el Premio Loewe a la Creación Joven, y el Premio Fernando Quiñones de novela, entre otros.

Define su poética: “Me interesa el compromiso con el hombre, que no es una poesía panfletaria. Me interesa el rigor con el pasado, con el lugar que nos corresponde, el latido del mundo en que vivimos. Al final, no importan los temas, que son los de siempre. Lo importante es la forma, que es la que se forja en la respiración de hoy. La forma, siempre la forma, porque ninguna proclama política, emocional o erótica justificará nunca al mal poema.”

Pérez Azaústre ha dicho de su obra : “Las Ollerías' es una avenida de Córdoba, transformada en un espacio simbólico de la memoria: un territorio en el que es posible la reconstrucción personal a través del poema",. El libro tiene cinco partes donde la voz del poeta reconstruye su memoria inmediata. Por allí, cruzan los días, la cotidianidad, el amor y las relaciones con su familia, y, en especial, con su padre. “Es la acotación de un territorio simbólico. Me dirijo a un interlocutor en una especie de memoria familiar, de cómo he ido reescribiendo mis recuerdos de infancia y de la época más reciente de mi vida. Es una radiografía emocional.”  

En realidad , es desde nuestro punto de vista un libro de la memoria; pero no un libro cualquiera en el que el pasado se revive con más o menos potencia,  acercándonos los paraísos perdidos a los que se refería Borges , no: es el libro de la memoria total, en “Las Ollerías “, el poeta , pese a su juventud , realiza un acto de reconstrucción total del tiempo y del espacio, barriendo en términos de positivismo un pasado cuyo escenario está tan vinculado a su propio ser que constituyen un todo en el que el poema es el instrumento del retorno; pero un retorno global. Y en el que el poema, la escritura, es el medio ideal para conseguirlo: “Dice un amigo mío que al paraíso/ no se puede volver. Quizá tenga razón. / Pero qué es escribir, y además qué es vivir/ sino un regreso torpe al paraiso,…/…/ Quizás solo es posible nombrar el paraiso/ si se ha dejado atrás.”
 
La memoria se hace materia de este hermoso libro: “Eran los días felices de la celebración./ La luz era muy blanca, aún más blanca/ sobe el pinar abierto en el camino…” ; así como los elementos que conformaron la vida diaria y sus excepcionales salidas de la rutina: “… ¿Cómo era aquella casa azul donde estuvimos?/ Pudo ser aquel coche, un Renault 5 blanco/ encallado en la arena de una noche infinita./…”  pero también la presente cotidianidad : “La vieja contractura de la espalda/ ha vuelto a aparecer,/ como un amigo incómodo que un día/nos viera cometer los pecados feroces./…”. Memoria sólida y pura vida, memoria absoluta en su función de radiografía emocional para la que el poeta se hace una pregunta con respuesta incluida: “…quizá ser un licántropo del tiempo/ consista únicamente en recoger/ todos los fragmentos de la foto,/ para poder guardarla en el armario/ de las horas futuras.”  

Todo ello en una consistente escritura, sólida en la que como él dice, y es una mención digna de tener en cuenta, sobre todo por poetas de su edad, que la tienen marginada , la rigurosa presencia de la forma: “. Lo importante es la forma, que es la que se forja en la respiración de hoy. La forma, siempre la forma, porque ninguna proclama política, emocional o erótica justificará nunca al mal poema.”

Creemos un merecido Premio Loewe para un joven poeta que ya es presente en la poesía española de nuestros días. 


©F.Basallote
Publicado en Papel Literario, 2/10/2012






martes, 26 de febrero de 2013

RESEÑAS - I POETAS ANDALUCES. José Mª Gómez Valero, "Los augurios"



RESEÑAS DE OBRAS DE POETAS ANDALUCES
LOS AUGURIOS de JOSÉ MARÍA GÓMEZ VALERO











EN LA FRONTERA DEL VERSO, a propósito de LOS AUGURIOS
de JOSÉ MARÍA GÓMEZ VALERO
Premio Alegría 2011
ICARIA. Barcelona, 2011



José María Gómez Valero( Sevilla, 1976), obtuvo con este poemario el Premio Alegría 2011. Es autor de los libros de poesía: Miénteme (Qüasyeditorial, Sevilla, 1997), El libro de los simulacros (Ayuntamiento de Lepe, Huelva, 1999), Travesía encendida (Vitruvio, Madrid, 2005) y Lenguajes (César Sastre Editor, 2006. Ha obtenido entre otros, los Premios Ciudad de Lepe, Ciudad de Mérida , Primer Premio en el III Certamen Internacional de haikus ,Facultad de Derecho de Albacete, etc…Poemas suyos han sido recogidos en diversas antologías, entre ellas Once poetas críticos en la poesía española reciente (Baile del sol, Tenerife, 2007); El sol ,los pájaros,( Facultad de Derecho. Albacete, 2007). Participa en diferentes proyectos escénicos que relacionan poesía y música. Imparte talleres de creación literaria, campo pedagógico en el que trabaja e investiga desde hace años. Forma parte del colectivo de acción cultural La Palabra Itinerante.

Un poeta joven y comprometido que avanza en una línea cuyas directrices poéticas son, en sus propias palabras: “Decir con responsabilidad cívica y generosidad, decir desde la conciencia del mundo en que vivimos, desde el conflicto, desde la herida del vivir, desde lo que nos une y conmueve.” Y ese decir se hace en textos “en los que se puede ver una "gran economía del lenguaje", así como una importante "unidad" en la dimensión literaria” en palabras de Jaime Siles.

Respecto a “ Los augurios” , el citado Siles, que presidió el jurado del Premio Alegría, dijo que : “es un libro «digno», cuyos poemas tienen «unidad y contestación», y además está «muy bien estructurado», con un ritmo y corte del verso «importante»…”, añadiendo que….«No tiene una temática, sino una forma. Parece minimalista, pero no lo es. Tiene un 'corpus significativo', con una escritura hacia dentro y muy cuidada, en la que se percibe la frontera del verso»,  

Si Jaime Siles hubiera incidido en el análisis de la obra, seguramente habría añadido que en la misma se encuentra una clara influencia  de la poesía japonesa, patente en la brevedad, en la concisión, en la agilidad de la sugerencia y de la instantaneidad propias del haiku, poema en el que el joven poeta sevillano es un experto y premiado haijin. Esta influencia trasciende de lo que es la forma de este pequeño poema de diecisiete sílabas y se extiende en el aire del poemario, dejando patente una posición externa del poeta  que como dice Siles escribe “hacia dentro”, pero como aquellos viejos maestros del haiku lo hace desde el mundo , como él mismo dice en su Poética: “…desde el conflicto, desde la herida del vivir…” ; pero acentuando en su mirada un cierto soslayo crítico. 

 Tiene “ Los augurios” , cuatro partes numeradas, aunque temáticamente pueden definirse cada una de ellas con un motivo más o menos común. Así, en la primera parte, el tiempo se erige casi en protagonista, no en vano se abre con una cita de Heráclito: “¿Cómo puede uno ponerse a salvo de aquello que jamás desaparece?”.  A lo que en su primer poema dice el poeta: “ …Despertar,/ abrir los ojos,/ ansiar el tiempo/ en el que nada se derrumba.”, expresión en la que subyace un claro sentido de búsqueda de perfección, y al mismo tiempo de constancia de lo efímero, patentizando la importancia del instante : “…Instantes decisivos/ y frágiles./ Instantes decisivos / y eternos./ El brillo de la hoguera alborotando/ las hojas de los árboles.” . Hay otro aspecto común al haiku, la naturaleza, el espacio exterior, muy presente en la segunda parte: “Sentir en cada paso/ el frescor de la tierra/ bajo la hojarasca.”  ,  “…Bajo el agua/ unas piedrecitas/ juegan con la corriente/ y se mueven despacio” . En la tercera parte está de nuevo presente el tiempo, pero ahora bajo el disfraz de la muerte, de la destrucción, al mismo tiempo que late el deseo del  fulgor del instante detenido:  “..El fruto desbarata/ la forma de la flor…” , “La noche cae/ y nadie la recoge/ el mar queda cubierto de luciérnagas.”, “…Flor de jazmín,/ pasajera de la prisa. En el centro la aguardan,/ para hablar de la muerte,/ los nenúfares.”. La cuarta parte, precedida por los versos de Sophia de Mello : “ Terror de amarte en un sitio tan frágil como el mundo…”, hablan del amor pero de un amor en el filo de la navaja, ya que en todos  sus versos está presente el terror de la poeta portuguesa: “…Rendidos y abrazados/ subimos al tobogán del olvido…”, “ Tu sonrisa no sirve para nada/ en este mundo infausto,/ insolente,/ inquisidor,/ impío./…” 

Un poemario formalmente muy sólido, coherente con las líneas de la poética del autor, en el que a veces hay una aproximación,  – por desvío del haiku-  hacia lo aforístico, con un mensaje que se sale asimismo del de la filosofía zen del poemita japonés, ya que no hay un goce del mundo , sino una forma de intentar reconducirlo “…desde el conflicto, desde la herida del vivir…”, llegando a veces a situarse , como decía Siles, en las mismas fronteras del verso.


© F.Basallote
Publicado en Papel Literario, 6/03/2012



 

RESEÑAS I - POETAS ANDALUCES. Jorge de Arco, "La casa que habitaste"



RESEÑAS DE OBRAS DE POETAS ANDALUCES
LA CASA QUE HABITASTE de JORGE DE ARCO











QUEDA SU MÚSICA
Sobre LA CASA QUE HABITASTE de JORGE DE ARCO
PREMIO INTERNACIONAL SAN JUAN DE LA CRUZ, 2009
ED. RIALP. MADRID, 2009. 



Jorge de Arco (Madrid, 1969) es Licenciado en Filología Alemana y  Profesor universitario. Ha publicado, Las imágenes invertidas, Lenguaje de la culpa (Premio Ciudad de Alcalá),  De fiebres y desiertos, (Premio Comunidad de Madrid de Arte Joven),  La constancia del agua,  La casa que habitaste, (Premio Internacional de Poesía “San Juan de la Cruz”, 2009).En 2010 publicó su primer libro de poesía infantil y juvenil, Con el balón en juego (Hiperión. Col. Ajonjolí. Madrid, 2010). Está incluido en diferentes antologías como La voz y la escritura, Un siglo de sonetos y Los 33 de radio 3, Los jueves poéticos, etc. Ha traducido poesía alemana, inglesa e italiana. Ejerce la crítica literaria en muy diversos medios. Es Director de la Revista Poética Piedra del Molino. Es Hijo Adoptivo de Fontiveros, tierra natal de San Juan de la Cruz. Define su poética  diciendo que “… la poesía me ha acompañado con rigurosa fidelidad. Más fiable, si cabe, que un amigo o una amante, ha ido perfilando mi condición humana con la plena confianza de que su poder sugeridor, su reveladora esencia, puede convertir en virtud cualquier amarga experiencia, cualquier ingrata realidad.  
La casa que habitaste,  premio Internacional de Poesía «San Juan de la Cruz» 2009,es según  Gonzalo Santorja, miembro de su jurado:”… un libro sanjuanista y contiene muchísima emoción y verdad y también un ritmo muy cauto que a veces se disimula pero que al final de los poemas golpea como un aldabón.”, aunque no sólo de San Juan se notan influencias, hay algunas claramente manifiestas. En realidad, emoción y  ritmo, constituyen el soporte poético del poemario,  provocados la primera por la intensidad existencial  que sabiamente  imprime  a un verso fluido, de léxico riquísimo, con voces recuperadas que a algunos  nos sugieren tiempos y espacios olvidados, y el segundo estructurado físicamente en la indeformable malla del endecasílabo y el heptasílabo, consiguiendo un melodioso efecto musical.   


Aunque la insistente presencia de un intenso sentido existencial que invierte la memoria en la otra cara del espejo, no puede ocultar en su honda verdad claros vestigios de nostalgia, de una nostalgia espacio-temporal y de una nostalgia íntima, en la que se lee casa con las letras puras de su sentido exacto, en las que se lee espacio con la fuerte entereza de la raíz, en la que se lee tiempo con las manecillas de un reloj de eternidades, y en la que se lee amor con la pureza de la entrega  y se lee ausencia en las dolorosas saetas de soledad y silencio.


Su estructura dividida en cuatro partes, de tan profundo sentido existencial, confiere al poemario   una intensidad modulada del tiempo que la hacen asimilable a una especie de sinfonía poética, a veces con cierto patetismo que va más allá de la propia función de la memoria.  Estas cuatro partes son: Lo que fuera tuyo, Haber vivido tanto, La luz sedienta y Coda.   Y si tomamos el símil musical no cabe duda que Lo que fuera tuyo es un Adagio en el que la memoria en un lento proceso de retorno  se hace presente: “Regresas hoy a lo que fuera tuyo/…/ al río extenuado de esta casa./…/ Han pasado los años y las sombras/…/ Giras el pomo y arden/ los ojos y los labios/ al cruzar las heridas de una puerta silente/…” , y  esa es una presencia lacerante : “Ahogas una lágrima –o un grito-/ de ausencia en la garganta/…”  , en ella  “Resbala el alba/ por tu melancolía y amaneces/ con un puñado / de soledades rotas/…” y  vive lo perdido  regresando en el tiempo : “…y atrasa el corazón cuando memoras/ la  albórbola irredenta de los pájaros, / el olor de la harina molinera,…”, al fin y al cabo los instantes de la dicha  que  se fue y que en esta casa se hace dolorosa herida: “ Y nada duele tanto/ como la certitud de tantas soledades/ aún por recorrer,…”. La segunda parte Haber vivido tanto, es un tiempo Largo,  es una  especie de ajuste de cuentas con el recuerdo: “ …Pues lo vivido –aire de otro tiempo-,/ reposa quedamente en las uñas garfiadas del ayer,/ muriendo a cada instante que alargamos –esclavos- la memoria./…”, que se hace , a veces,  de intenso patetismo: : “…Cuando la dicha última se aferra al corazón/ y canta;/ y leve/ derrama sus adioses, su temblor de luna blanca y rota…” . Y  pese  al “… gozo bendecido de la carne,/ la amargura indecible, el odio cincelado en las orillas/ el pájaro del alba ”,  se suceden “…heridas enlutadas con saliva sombría y lacerante,/efímeras batallas/ en los confines de la ausencia…” . Y en ese largo ajuste con la memoria reincide el tiempo primero  con su luz aún encendida: “ Mi infancia tuvo almenas/ desde donde poder ver paraísos/…”, para lamentarse profundamente: “ …Nos/ han/ robado/ el añil mas remoto de los ojos…”  y llegar a decir como quien conserva el último tesoro: “ Guardamos poco más que la limosna/ de los recuerdos, ínfimas esquirlas /…”.  En el tercer tiempo, que es el tiempo del amor, el tiempo en que habitó en esa casa escindida de la memoria, es un Tempo Vivace, un Scherzo de intensidades en el que la música de los cuerpos los hace vibrar : “Crepitan esta noche entre mis manos/ la luz sedienta,/ el verbo amante, la desnuda madeja de tu cuerpo…”  ; pero la memoria devuelve dolorosamente las palabras que “…golpean / los resquicios del alma,/…/ “Mi corazón ya late en otra casa”/” , el amante dirá :”…Antes que llegue el alba te habrás ido/ y el llanto impenitente/ entre los labios y el alcohol amargo/ será huésped…” . Queda sólo el lacerante recuerdo, su viva llaga:  “Fue tu boca de abriles,/ el milagro solar de tu cintura…”, en versos que nos traen reminiscencias del Julio Mariscal de Poemas de Ausencia, como  “ Anclado en el amargo/ verbo de este Noviembre y su acedura,/ mientras la luz morada del otoño/ se hace cristal, aliento, madrugada,…” y que el verso de José Hierro acentúa : “Tu boca resucito en esta hora en que/ el aguardiente tiene sabor a nunca más.”. El tiempo final, Coda, es un Tempo Grave, en el que la música se desliza quedamente entre los resquicios de una casa en la que “ Dentro, el humo / del tiempo que ya fue, se va posando/…” una casa que es solo : “...un muro/ de cal y niebla,/…/ por donde, al aire de su larga cola,/ pasea, diosa insomne,/ la lagartija de la soledad”   


Acertado poemario en el que introduce en la denominada Poética de la Memoria una interesante variación ontológica, la memoria no es un instrumento del alma para revivir emociones y vivencias, en este poemario Jorge de Arco convierte la memoria en  esencia vital, “ una casa/ por habitar…/…/el eco lastimado/ de unas pisadas ...”.

©F. Basallote   
Publicado en Papel-Literario ,5/10/2011



lunes, 25 de febrero de 2013

RESEÑAS 1 - POETAS ANDALUCES. Rosario Troncoso, "El eje imaginario"



RESEÑAS DE OBRAS DE POETAS ANDALUCES
EL EJE IMAGINARIO de ROSARIO TRONCOSO













ALREDEDOR DE LA VIDA
A PROPÓSITO DE EL EJE IMAGINARIO de ROSARIO TRONCOSO
EDICIONES EN HUÍDA. Sevilla, 2012


Rosario Troncoso (Cádiz, 1978). Licenciada en Humanidades, es actualmente profesora de Lengua Castellana y Literatura en Secundaria. Máster en Periodismo,  fue fundadora de la revista Astarté, también ha  trabajado en diversos medios como El Correo de Andalucía. 
  Tiene publicados los libros de poemas Huir de los Domingos (Editorial Padilla, 2006),  Delirios y Mareas (Publicaciones del Sur, 2008) y  Juguetes de Dios (CVA Ediciones, 2009)  Ha obtenido el accésit en el XV Premio de Poesía del Ateneo de Sanlúcar de Barrameda. Cuenta con publicaciones de diversa índole, como ponencias en congresos y colaboraciones en diferentes publicaciones especializadas, así como la adaptación didáctica de La Celestina (Ed. AE,2009).

Ahora nos ofrece su último poemario: El eje imaginario, que trasciende a los anteriores y que consolida su línea  poética alrededor de los parámetros fundamentales de toda poesía: amor, desamor, tiempo, memoria, sociedad, cotidianidad…

Según la  Geometría un eje de rotación “es una línea recta respecto a la cual una figura geométrica puede rotar”,  y este eje imaginario alrededor del que gira su poesía se establece en un espacio en el que en su giro inverso de fin a principio, atravesado a veces por ráfagas de luz  recorre sus vivencias cristalizadas en poesía lúcida, palpable y cotidiana realidad hecha carne de sus versos, en una praxis que la misma autora define. Para ella la poesía es “… como un goce de los sentidos y una reflexión para tomar perspectiva de la realidad que nos rodea…”, en fin de cuentas vida y búsqueda, el eterno camino de la poesía.

 Tiene este poemario tres partes que ya hemos citado: Fin,  Ráfagas de luz y Principio, que asimismo significan tales etapas vitales: El final de un mundo  caduco, “sepultando tiempo/palabras y ciudades…”;  el luminoso encuentro con la poesía, “los enfermos de lucidez: los poetas.”  Y el principio fundamental de la vida: el Amor, “….abriéndome una vida / a horcajadas sobre ti.”.  En  la primera parte: “…La tierra dolorida/ regresa a los abismos primigenios/…”, provocada por esta sociedad en la que “Momo afila sus burlas/ mientras desfila el ridículo baile/ de marionetas de carne, cadáveres/ ebrios en fanática cabalgata/…” , a la que la proximidad del Apocalipsis hará “…desaparecer colinas,/ montañas desplomadas/ todo el peso del cielo/ sobre nuestras costumbres.”,  en un abandono de una vida que muere porque “La muerte es apagar de golpe todas las luces.”, entre otras cosas el desamor : “…Por impago de amor/ los errores llamaron a la ausencia./ Y llegó la muerte a desahuciarnos.” y el dolor que lacera el recuerdo : “ Mi memoria es tan débil/ que al evocarte, sólo sé que dueles/ aquí/ justo aquí, donde huye mi vida/… “.

La segunda parte Ráfagas de luz, es como una serie de destellos en la noche oscura del universo en la que en el proceso de la búsqueda la memoria  retorna a la infancia: “Desear el regreso a la familia./ Encadenarse al árbol de la infancia.” y encontrar aún  “…resto de azúcar,/ entre sílaba y  sílaba  en aquellos poemas  que “crecían versos orgánicos,/ sin otro ritmo que el de los latidos.”, para llegar a los “…versos más puros,/ aquellos que germinan/ como hiedras, en los muros de casas/aferrados a tu origen en las piedras/”.  Y la tercera parte, El principio, es la rotación sublime, la del encuentro del amor: “…Dejemos en el mundo el equilibrio. / Que no hay nada más hermoso que caer,/ ya deshechos como arena de duna/ el uno sobre el otro, sin orillas.” , encuentro asimismo de las hermosas palabras que hacen escribir una unos versos llenos de erotismo: “ Tú./ Del altar descendido, hasta tocarme,/ redondeando mis vértices/ hasta hacerlos sucumbir,/ temblar y hacerse espuma.” ,  “!....Y fue entonces que nos acostumbramos/ embebidos de la extraña melaza/ que recubre y oculta el vicio absoluto,/ a tocar el dintel del paraíso.”

Un  libro que nos habla de una poeta que aún se arriesga en la búsqueda de campos nuevos; pero que lo hace con la seguridad de encontrarse en el camino exacto, ya no en el eje imaginario sobre el que ha de rotar su vida sino sobre la trayectoria nimbada de palabras que construyen una poética de madurez.

©F.Basallote  
Publicado en Papel-Literario, 22/08/2012

domingo, 24 de febrero de 2013

RESEÑAS I - POETAS ANDALUCES. Alejando Pérez Guillén, "Matar a Narciso"



RESEÑAS DE OBRAS DE POETAS ANDALUCES
"MATAR A NARCISO" DE ALEJANDRO PÉREZ GUILLÉN














ACERCA DE "MATAR A NARCISO" DE ALEJANDRO PÉREZ GUILLÉN.
EDICIONES ALFAR, SEVILLA, 2012

ALEJANDRO PÉREZ GUILLÉN (Benalup-Casas Viejas, 1973), es Licenciado en Filología Hispánica y trabaja como bibliotecario en su localidad. Ha publicado los poemarios  :Entrevista con la palabra (Ayuntamiento de Benalup, 1997), Sueños de hadas sin hada madrina (Salobreña, Granada, Alhulia, 2003) y Monedas de papel (Cádiz, Diputación, 2006). También el libro de relatos La otra realidad, (Aladena, 2009). Ha escrito en revistas de carácter cultural, como columnista y crítico literario. 


El mito de Narciso ha llegado a significar en el mundo actual un estadio de inmadurez permanente manifestado en una sociedad nihilista y a la vez inmadura, insolidaria y corrupta, estática en su pose de egoísmo intrascendente y estéril. Y ese Narciso universal y a la vez individualizado es el que Alejandro Pérez Guillén   decide en su último poemario eliminar.  Matar a Narciso, es una obra de madurez en cuyo prólogo Josefa Parra dice   que "Matar a Narciso es matar es matar esa parte de nosotros mismos que se recrea con demasía en el propio yo. Es buscar al otro y buscarse (siendo otro, más alto, más maduro, más vivido)…".  Y es en esa lucha cotidiana de superación poética donde consigue eliminar esas reminiscencias de mito de la liviandad, volviendo la vista al mundo abierto de lo cotidiano, como una especie de descubrimiento en la otredad el sentido verdadero y trascendente de su poética. Tanto es así que afirmando esa mirada a lo circundante comienza por su propia raíz en la tierra y en la historia: “En la prehistoria del hombre,/ en los hogares de la cueva/ el sueño de la tiza/ duerme fiel bajo el fuego de la piedra./…/Allí en la historia de un pueblo/late la poesía/ como un corazón en silencio.” .  Y se detiene en el paisaje, no como apropiación estética, sino como espacio común: “…/En otoño el río Ubrique es/ una mancha de sombras empapadas/ que todavía el sol no ha conquistado,/ errante hilo de sangre/ que da vida al paisaje,…”; “Las nubes rodean las rocas/ a modo de visera/ para que no nos ciegue el sol/ y puedan escuchar con nitidez/ las conversaciones del río.”. El poeta sale demismo, se funde con el paisaje y de alguna manera en la metáfora explica su cambio: “Las palmeras vigilan la serpiente/ de alquitrán que dispuesta/ corre a mudar la piel/ en el cauce del río.”  . Hay como una especie de comunión con el medio, en el que el levante, ese viento tan común en su tierra está presente: “Corazón de levante./ Con su arena la playa/ me abraza el cuerpo.”.


Y hay una manifestación del cambio, que recurre al tiempo pasado como recurso de verificación: “Soy un grito en la garganta/ que se muerde la memoria/ y se escucha en la distancia/ como un eco de otra época./…”, aunque siempre quede el recuerdo: “…las ondas van y vienen,/ borran mis pasos,/ mas siempre queda la memoria,/…”. Sin embargo triunfa la cotidianidad,  la constancia del instante: “Ahora mismo regreso al presente./Salgo a la calle y siento el olor de la vida…” y todo se hace repique de campanas, “balada del balón en la alameda”,la lluvia haciendo caligrafía en el suelo,  “ el gris cansancio del camino…”, elementalidad cotidiana . Y en esa elementalidad  es parte principal el amor, porque “El presupuesto de un corazón solo/admite dos actores…”  y uno de ellos dice:”Escucha, mujer, el amable canto/ de un beso muerto de sed en tus labios…” y llega a escribir la hermosa metáfora: “Los cráteres de fresa de tus senos/ cabalgan sobre el lomo blanco de unos versos…”. Ha muerto Narciso

©F.Basallote
Publicado en Papel-Literario, 25/06/2012

sábado, 23 de febrero de 2013

RESEÑAS I - POETAS ANDALUCES. Raquel Rico, "Resplandor"



RESEÑAS DE OBRAS DE POETAS ANDALUCES
RESPLANDOR de RAQUEL RICO









RESPLANDOR de RAQUEL RICO
Renacimiento. Sevilla, 2011


Raquel Rico ( Málaga, 1948). Es profesora de Historia del Derecho en la Universidad de Sevilla y autora de diversos libros de su especialidad.  Como poeta ha publicado Conciencia del instante (Dendrónoma, Sevilla, 1984), Miradas (Quasyeditorial, Sevilla, 1993), De par en par (Pre-Textos, Valencia , 2000) y Miscelánea Italiana (Signum, Edizioni d’Arte, Milán 2005). Ha participado en los libros colectivos Poetas en el Aula (1995), Palabras sin Fronteras - I Encuentro de Escritores Huelva-Algarve (2002), A un poeta futuro (2003), Palavras sem Fronteiras – IV Encontro de Escritores de Algarbe-Andaluzia (2006) y  está antologada en Poesía Viva de Andalucía., de la Universidad de Guadalajara. México, 2006. Ha obtenido, entre otros, los premios Nacional María Espinosa y Luís Cernuda.  


Tiene  Resplandor, tres partes: A dos voces, Dos amores me habitan y Lugares. Los poemas de A dos veces, están inspirados en los Sonetos de Shakespeare , según la autora: “Los poemas incluidos en “A dos voces” son el resultado de un reto: utilizar  alguno de estos versos como temática de mis propios poemas. En ellos las palabras de Shakespeare se integran en el texto o son la cita que lo justifica.”. Los sonetos referenciados son los números 10,17, 52, 57, 58, 65, 71, 92 y 147.De algunos,como es el  caso del soneto 52, los versos del poeta inglés sirven de inicio: “Como un cofre es el tiempo en que tú estás ausente.”, en otros como es el 58, los versos están incluidos en el poema:  “…porque  viví contigo/ la certeza más alta, esperar es lo mío/  y en ti mi confianza “, mientras que en otros como es el soneto 97, está presente sólo como versículo que ha inspirado el poema, en este caso “¡Oh, que frío en los huesos y qué días más oscuros!”, servirá para inspirar el poema [ De un pasado que mata…], en el leemos “…Hiela el frío la savia/ barre el viento las hojas./ Su recuerdo es espina,…”.


Dos amores me habitan, toma el título a su vez del soneto 144 de Shakespeare :”Dos amores  me habitan, uno es paz y otro es llanto,/ como sombras que acuden a tentarme sin tregua.” . Y ese tormento llamado amor , o desamor en este caso, ausencia, desolación se hace presente en estos poemas en los que la poesía de Raquel Rico torna a los tiempos primeros  y en el hermoso poema  “[Oscuro, insomne, herido y memorioso]…”  cuyo nombre rotundo procede del poeta  Servando Meana, en citación de Felipe Benitez,  constituyendo el primer verso del mismo en el que  la poeta explica el daño de esos cuatro adjetivos  por “ …el amor que tuve y ya no tengo.”, y afirma dolorida que “ La ausencia es un espejo/ sin reflejo,/ es negación total,/ ojos cerrados/ y labios que, sin labios,/ carecen de palabras./…”, siendo el presente memoria  que “…En el dolor germina/ la conciencia y ahora soy/ quien cultiva en el vacío/ sólo una flor de cólera /y orgullo.”


La tercera parte, Lugares, es un hermoso cuaderno de viaje en el que la emoción deja su impronta en los sitios que su sensibilidad evoca: “ Un hotel con hortensias/ a la orilla del Arno/ y este jardín/ en el que, un año más, brillan con dorada inocencia / las hojas renovadas, / me bastan/ para sentirme en paz/ con lo vivido.”.  Paisajes e instantes, como “Atardecer sobre el Arno”,: “…Caía la luz/ con densidad de agua/ y el agua reflejaba/ su rosado fulgor/…” , o sensaciones  como en “Marina de la casa”: “El mar era un sonido/ un respirar constante/ a orillas de la casa/…” o en “Cita en Santiago”, donde a la sensación de la lluvia se une el látigo mordaz de la memoria: “ Era entonces la lluvia/ un repiqueteo de campanas,/ una bandada de paraguas/ que abrían/ y cerraban las horas, / el breve tiempo del amor./…”.   Para concluir que “Hay olores, sonidos/ que aún pueden conmoverme/….”, como un leve resquicio para la esperanza.


Un hermoso y trabajado libro, silencioso, sin alharacas ni vehemencias falsas, antes bien hecho a la medida del sentimiento y con un arte mesurado en el que ritmo y medida ponen el contrapunto a una poesía interiorizada que en la calma de lo evocado se extiende con el suave resplandor de un ocaso de otoño.



©F.Basallote
Publicado en Papel-Literario, 11/04/2012

viernes, 22 de febrero de 2013

RESEÑAS I - POETAS ANDALUCES. Manuel Guerrero, "Loco afán"



RESEÑAS DE OBRAS DE POETAS ANDALUCES

LOCO AFÁN de MANUEL GUERRERO











UN POETA EN EL CAMINO.
LOCO AFáN de MANUEL GUERRERO
Ediciones En Huida. Sevilla, 2011.


 Manuel Guerrero Cabrera, (Lucena, 1980), es Licenciado en Filología y  trabaja como profesor de lengua y literatura .Entre sus publicaciones destacan las relacionadas con estudios y artículos de investigación literaria, como  Estudios críticos de literatura del Siglo de Oro   y Tango. Bailando con la literatura . Como poeta,  ha escrito anteriormente El desnudo y la tormenta,   además de colaborar  en diversas revistas digitales.   Escribe columnas de opinión en los diarios digitales Sur de Córdoba y Lucena Hoy. Confiesa ser un apasionado del tango argentino del que dice: “mi atracción por el tango argentino ayuda a la musicalidad de mi verso e imprime un tono nostálgico y, en ocasiones, amargo a mi poesía”, tanto es así que el título de la presente obra, Loco afán,  viene del tango Por la vuelta de Enrique Cadímano.  



En cuanto a su poética  dice: “Mi poesía está marcada por la transición, la inquietud y la lectura (y relectura) persistentes. Las tres se complementan, en resumen, para explicar el por qué del verso e implicar el desencanto de lo existente (o recreado): como una continua duda en elegir lo cotidiano (en especial, el amor) o en ahondar en lo sugerido por otras voces (me gusta partir de citas de otros autores)…”. No niega sus  influencias, en particular las de   Luis Alberto de Cuenca, Javier Lostalé, Rubén Darío  o, como hemos citado antes, la del tango.



 Loco afán se trata de un libro dividido en cuatro partes, la primera , Loco afán ,dedicada a la poesía en sí misma; la segunda, El mismo amor,  a dicho sentimiento;  la tercera, La misma lluvia, a la vida (con poemas de diversa temática) y la última ,innominada, a la muerte, con un verso corto de carácter funerario.



“Explicar el por qué” misterio y  esencia del verso, en Loco afán. La  vigilia estéril del poeta en la espera de la luz: “Hoy, que líneas frías/ tornan mi verso ausente,/ la noche solitaria/b me entrega muchas bocas de silencio/ y un papel que semeja una nevada.”. Aunque, una vez logrado, “el verso se conserva / al final del poeta…” y da la respuesta a tanta búsqueda: “Primero tu respuesta,/ después la mía/ y luego la de todos los poetas/ que la han confiado…” . “Elegir lo cotidiano” en El mismo amor, porque “ …soy un dios/ porque la beso/ porque la gozo,/ tendida en nuestra cama,/ juntos los pechos/ y pegados los labios/ en sus nalgas de rosa…” , “…y tu boca me ofrece/ el alba roja,/ tu cintura, el deseo/ de una inquieta paloma/ y tu pecho, azahares.”. En La misma lluvia , incide en lo “sugerido por otras voces”, usando las palabras trasvestidas en un verso conceptualmente coincidente  “ Viva fotografía de lo lejano…”, para pedir, apoyado en un versículo de Lostalé: “Acuérdate de mí cuando la aurora/ me vista con la sílaba desnuda…” . En la cuarta parte, la intensidad de la síntesis, la breve emoción de la palabra es apenas intuición, una leve brisa en un mar de oscuridades, el cárdeno esplendor del rayo, el instante… “Debió quedarse en tierra, donde la vida es larga;/ pues la plata del mar nunca acaba en la sien.”, “ No le quites la máscara, caminante, pues sombra de la vida su risa , es ya fingida gloria.”  . Ni aforismos, epitafios puros  en el mármol del verso.



Un poemario denso, pese a su levedad física, una muestra  de los fractales de la luz de un poeta que busca en los senderos de la pureza la última razón de su poesía en un ejercicio  duro en el temple de su musculatura lingüística, en la música del concepto ajustadamente afinado, en la sombra precisa para que el verso luzca con su brillo exacto.

Un poeta  en el camino.



©F.Basallote
Publicado en Papel-Literario , 28/11/2011

jueves, 21 de febrero de 2013

RESEÑAS I - POETAS ANDALUCES. Carmen Ramos, "Poliédrica"



RESEÑAS DE OBRAS DE POETAS ANDALUCES

POLIÉDRICA, de CARMEN RAMOS
















ESPACIOS DE PUREZA POÉTICA.

A propósito de POLIÉDRICA, de CARMEN RAMOS

EDICIONES EN HUÍDA, SEVILLA, 2011







Carmen Ramos,(Gibraleón, 1968). Economista de profesión, miembro activo de la Asociación Fahrenheit 451 – Las Personas Libro de Sevilla, participa con ellos en diversas convocatorias de fomento a la lectura. Algunos de sus poemas han visto la luz en blogs y revistas digitales. Un microrrelato y dos poemas se han  publicado en la antología “Des-amor”, (Groenlandia, 2010). Varios poemas de su autoría aparecen en la antología Verso Libro   de la cual es coordinadora junto con Fran Nuño y Esperanza García Guerrero. Colabora además en “Papelusar”, publicación de periodicidad irregular y en la revista “Gibraleón es Cultura”, donde tiene una sección fija llamada “Lecturas no obligatorias”. La plaquette “Mudanza Interior”, (Ediciones en Huida, 2010) es su primera publicación en solitario. y la presente, Poliédrica”,  su primer poemario.



El poliedro es la figura geométrica más común, no sólo por su carácter espacial, sino por su característica más definitiva: su superficie está formada por un número variable de caras o facies. De ahí que el adjetivo poliédrica haga alusión a la multiplicidad de caras o facetas que presenta. Puede ser éste el motivo por el que la autora lo elige, con objeto quizás de dar una impresión de multiplicidad  de su ego poético o, mejor dicho, de una sucesión de etapas, faces que ha presentado al mundo, de su poesía. Y dentro de esta elección hemos de destacar cómo otros elementos del poliedro: vértices y aristas, con su significado conceptual de agresividades están ausente de este libro. Ya dice la autora en su primer poema, denominado precisamente Poética, a modo de definición de intenciones: “Una escribe/ sin querer hacer daño./ Negra lanza/ o vientre./ Pero sin querer hacer daño.”



Tiene el poemario cinco partes: Autodualidad, Cubo Soma, Prismas, Sólidos de Catalán y Teorema de Euler; cada una de ellas precedida de la definición geométrica adecuada y cada una de ellas con un contenido en el que permaneciendo, como es lógico, el estilo y personalidad de la autora., tienen matices diferenciados que permiten a cada una de ellas cierta autonomía dentro de la unidad de la obra.  En Autodualidad prevalece un sentido de introspección que se aproxima a veces a la autodefinición : “Recostada en el perfil de las lianas me gustaría tener otros ojos…”, dice con cierta disconformidad , aunque es más realista ante el dolor : “ Duele eléctrica la punzada,/ arriba/ más arriba./ Todo se enciende./ Olor, sabor, luz,/ luz más azul que el azul./ Radiante deseando oscuridad./…”. Y en este descendimiento a lo íntimo no puede faltar el recurso de la memoria : “… Lástima que el futuro haya borrado aquella carretera amarilla/ por donde cada domingo circulaba un Renault rojo/ lleno de niños…” . Y ,claramente, el rasgo autobiográfico: “ …Cuidadosamente,/ un día/ guardé todos mis déficits en una caja de música./ Ahora / ya ves: / con su melodía compongo versos.” .



En la segunda parte, Cubo Soma, utiliza el concepto del mismo como rompecabezas geométrico, para incidir en la Poesía como forma de vida: “…Como reconstruyendo un puzzle intento/ -hasta ahora con poco éxito-/ encajar las piezas de Mi Poema,/ mi vida.” y en esta   reconstrucción  es artificio indispensable la memoria: “…Volver donde todo comienza. Donde/ todo comienza….” y esa vuelta tienen siempre un lugar físico, aunque solo sea residual, como dijera  Ricardo Bellveser en “Las cenizas del nido”:“Tras de mí se ha derrumbado una parte de mi vida que de pronto ha envejecido, mientras hago inventario de la destrucción…”  , Carmen Ramos dice: “ Repaso con mis dedos el mapa de la geografía en la que fuimos felices./ Mis ciegos pasos me llevan a la puerta de aquella casa que creímos nuestra:/ ya no queda nada de ti. Ni de mí. Ni de los niños que fuimos/…”  para concluir en el último poema de esta parte:  “ …Quizás tan sólo hubiese bastado con deshabitarnos.”



 El Prisma, como figura geométrica con dos caras opuestas y paralelas  es la figura geométrica elegida para situar los poemas de amor, en un simbólico juego metafórico en el que los dos planos opuestos no hacen sino acostumbrarse: “Acostumbrando que mi cabeza/ sepa apoyarse en ese hueco que existe/ entre tu cuelo y tu hombro./…”. Y un aprendizaje tan dulce  “ Que mi cuerpo aprendió una nueva danza/ y que mi boca habló lenguas/ desconocidas./ Mientras, en mis labios, aparecieron/ olvidados besos./…” , hasta lograr decir : “ Hoy podría ser el último día  de mi vida/ y morir en este instante con todos tus besos en mi boca./…”. Instantes de la dicha en los que “ Yo crecía enredándome en tus pies,/ asaltando tu pecho, rodando por tu espalda/ para, tenue, florecer al fin en la punta de los dedos./…”, en tan hermosa  metáfora la sublimación de las caricias. Pero, la intensidad de la belleza es siempre efímera:  “…me dejaste/ con la soledad marcada./ Como queda la ciudad / la mañana de un día de fiesta/ tras la lluvia”



La cuarta parte Los sólidos de Catalán, como ellos cuyas caras no son regulares, quiere ser un retrato de la cotidianidad, “Las aceras de los lunes son/ pastosas y saladas como / las sopas de sobre./…”al mismo tiempo que se detiene doloridamente en la ausencia: “ Son tercos los ruedos,/ como cristales las gotas de la memoria/ que caen en el / vacío/…” .  La quinta parte, El Teorema de Euler tan solo incluye un solo poema, un precioso poema que define el libro:  “Un poema/ hecho de silencio/ Como un gorrión/ palpitando entre mis manos.”. Y es que, como en la música, el silencio en el poema lleva dentro tanta vida como ese corazón apresado entre las manos.



Un precioso y profundo poemario, en el que la autora como con un escalpelo ha ido separando los distintos estadios por los que su corazón de poeta transita y en un proceso de limpieza poética los ha ido decantando: tiempo, amor, memoria, ausencia, los eternos temas de la Poesía , para llegar en un juego de poesía pura a ese poema final, que sólo él, merece tan bello poemario.



©F.Basallote

Publicado en Papel-Literario, 15/11/11